Receta rápida de pudín de yogur y leche condensada

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Si buscas un postre rápido, delicioso y fácil de hacer, el pudín de yogur y leche condensada es la elección perfecta.

Este pudín combina la cremosidad de la leche condensada con la ligereza del yogur, dando como resultado un postre suave e irresistible.

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Además de sencillo de preparar, es una estupenda opción para cualquier ocasión, ya sea una cena familiar, una reunión con amigos o una fiesta. ¿Aprendemos a hacer este delicioso manjar?

Ingredientes

Para preparar esta receta necesitarás los siguientes ingredientes:

  • 1 lata de leche condensada (395g)
  • 2 botes de yogur natural (170g cada uno)
  • 4 huevos
  • 1 taza de azúcar (para el almíbar)
  • 1/2 taza de agua (para el almíbar)

Modo de preparo

Paso 1: preparar el almíbar

  1. Derretir el azúcar: En una sartén agrega el azúcar y calienta a fuego medio, revolviendo constantemente hasta que el azúcar se derrita y tome un color dorado. Este proceso se conoce como caramelización.
  2. Agregar agua: Agrega con mucho cuidado el agua al azúcar derretida. La mezcla burbujeará intensamente, por lo que es importante ir añadiendo el agua poco a poco y remover con cuidado.
  3. Mezclar bien: Continuar revolviendo hasta que el almíbar esté homogéneo y sin grumos.
  4. Línea el formulario: Vierte el almíbar en un molde para budín, distribuyéndolo uniformemente por el fondo y los lados. Deja la cacerola a un lado para que el almíbar se enfríe y se endurezca un poco.

Paso 2: preparar el pudín

  1. Batir los huevos: En una batidora batir los huevos hasta que estén bien mezclados y espumosos. Batir bien los huevos es fundamental para evitar que el pudín tenga un fuerte olor a huevo.
  2. Agregue los demás ingredientes: Agrega la leche condensada y el yogur natural a los huevos batidos. Vuelve a batir hasta obtener una mezcla homogénea y tersa.
  3. Vierta en el molde: Vierte la mezcla de pudín en el molde caramelizado, cubriendo bien todo el almíbar.

Paso 3: Cocinar

  1. Forma de la cubierta: Cubre la sartén con papel de aluminio para evitar que el pudín se seque o forme una costra durante la cocción.
  2. Baño maria: Colocar el molde en una fuente para horno llena de agua (baño maría). El baño maría ayuda a cocinar el pudín de manera uniforme y suave.
  3. Hornear: Hornea en horno precalentado a 180°C durante 1 hora y 30 minutos aproximadamente, o hasta que el pudín esté firme. Puedes comprobar la consistencia insertando un palillo en el centro; si sale limpio es que el pudín está listo.

Paso 4: Enfriamiento y Desmoldado

  1. Dejelo enfriar: Saca el pudín del horno y déjalo enfriar a temperatura ambiente. Esto ayuda a reafirmar el postre antes de guardarlo en el refrigerador.
  2. Refrigerar: Una vez frío, refrigerar por al menos 4 horas. El budín debe estar bien frío para que se desmolde correctamente.
  3. Desmoldar: Para desmoldar, pasa un cuchillo por el pudín para despegarlo de los lados. Voltéelo con cuidado sobre un plato grande para que el almíbar cubra el pudín por completo.

Consejos y trucos

  • Utilice huevos frescos: El uso de huevos frescos es fundamental para garantizar la mejor textura y sabor del pudín.
  • Variar el yogur: Si lo prefieres, puedes sustituir el yogur natural por yogur griego para obtener una textura aún más cremosa y rica.
  • Sabor: Agregue ralladura de limón o esencia de vainilla a la mezcla de pudín para darle un toque especial de sabor.
  • Desmoldar con facilidad: Si el pudín es difícil de quitar, sumerge rápidamente el molde en agua caliente para que suelte el almíbar.

Beneficios del pudín de yogur

Además de ser un postre delicioso, el pudín de yogur y leche condensada también puede aportar algunos beneficios nutricionales.

El yogur es una excelente fuente de proteínas, calcio y probióticos, excelentes para la salud intestinal. La leche condensada, aunque tiene más calorías, aporta la cremosidad necesaria para un postre irresistible.

Siempre es importante moderar la cantidad de azúcar en la dieta, pero una ración ocasional de este postre puede ser un placer placentero.

Variaciones de recetas

Aunque el Budín de yogur y leche condensada Aunque ya está delicioso por sí solo, puedes probar algunas variaciones para hacerlo aún más especial:

  • Pudín de yogur griego y leche condensada: para una versión aún más cremosa, sustituye el yogur natural por yogur griego.
  • Adición de fruta: Si quieres darle un toque afrutado a tu pudin, prueba agregar ralladura de limón o naranja a la mezcla. Los cítricos complementan muy bien la ligera acidez del yogur.
  • Coberturas especiales: además de la tradicional salsa de caramelo, puedes servir el pudin con gelatinas de frutas, sirope de chocolate o incluso un sirope de frutos rojos.

¿Por qué apostar por el yogur y el budín de leche condensada?

Esta receta es una excelente opción para quienes quieren innovar su postre de una manera sencilla y sabrosa. Además, el Budín de yogur y leche condensada Es una opción más ligera respecto al pudín tradicional, debido a la presencia del yogur, que aporta una textura suave y una ligereza única al postre.

Otro beneficio es la versatilidad. El pudín se puede servir en diferentes ocasiones, desde un almuerzo familiar informal hasta un evento más formal. Es un postre que gusta a todos y, con algunas variaciones, puedes adaptarlo a tu gusto personal o a las preferencias de tus invitados.

Conclusión

oh Budín de yogur y leche condensada No es un postre cualquiera, es una verdadera combinación de sabor, textura y sencillez que puede transformar cualquier comida en un momento especial. La combinación del yogur, con su ligera acidez, y el dulzor cremoso de la leche condensada crea un equilibrio perfecto, dando como resultado un pudín que agrada a todos, desde los que buscan un postre más ligero hasta los apasionados de las recetas tradicionales.

Esta receta ofrece una gran alternativa al clásico pudín, siendo una versión más suave e igualmente sencilla de preparar. El uso de yogur, además de aportar una textura más ligera, también aporta un toque saludable al postre, añadiendo proteínas y probióticos que pueden beneficiar la digestión, sin perder el placer de un postre dulce y saciante. Es una excelente opción tanto para quienes quieren innovar como para quienes buscan una receta práctica y rápida.

oh Budín de yogur y leche condensada También es versátil y se puede adaptar de diferentes maneras. Si prefieres un postre con un toque cítrico, agregar ralladura de limón o naranja a la mezcla puede aportar un sabor refrescante. Para quienes gustan de personalizar su presentación, servir con fruta fresca o en porciones individuales es una forma sofisticada de impresionar a los invitados. Independientemente de cómo elijas servirlo, este postre destaca por su sencillez y, al mismo tiempo, por su capacidad para complacer diferentes paladares.

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